Mural Niten Argentina
Intensivo de Jojutsu
por Basilio - 18-abr-2022
El pasado 9 y 10 de abril se realizó en San Pablo, Brasil, un entrenamiento intesivo y de perfeccionamiento de Jojutsu.
En el se practicaron Jojutsu del estilio Shindo Muso Ryu. Tambien se entrenó lkkaku Ryu Jittejutusu e Isshin Ryu Kusarigamajutsu.
En el se practicaron Jojutsu del estilio Shindo Muso Ryu. Tambien se entrenó lkkaku Ryu Jittejutusu e Isshin Ryu Kusarigamajutsu.
Una de nuestras alumnas de Argentina con más de 12 años de entrenamiento, viajó a la sede central del Instituto Niten en San Pablo para participar de un entrenamiento intensivo de Jojutsu de dos días. Además del evento, entrenó los días siguientes en el dojo central en Vila Mariana con nuestro sensei, Jorge Kishikawa, fundador del Instituto Niten.
Compartimos con ustedes algunas fotos del evento y una reflexión que ella escribió al regresar a Buenos Aires.
Energía pura
Shitsurei shimasu, onegaishimasu sensei
Realmente disfruté mucho poder entrenar jojutsu de forma intensiva y dedicada después de tantos años. Era precisamente lo que necesitaba para repasar detalles y pulir las técnicas que ya conocía. Iniciando con kihons, los movimientos básicos del jo, y terminando con los katas de Shindo Muso Ryu. Fue tan agotador como gratificante. Acabar con los pies adoloridos y los músculos cansados, pero con las baterías completamente recargadas. ¡Lista para ir por más!
Exactamente eso fue lo que hice.
Me quedé cuatro días más en San Pablo para poder entrenar con Sensei en el dojo central de Niten, Hokkaido. Desde hace más de tres años que no tenía la oportunidad de entrenar físicamente con Sensei, si bien durante la cuarentena en el 2020 asistí a casi todas las clases virtuales que dictó por Zoom desde su propia casa. Estar cara a cara, compartir el mismo espacio físico, no sólo me permitió ver más detalles que los mostrados por la cámara de la computadora, sino absorber e intercambiar energía con sensei, con senpais y kohais. Kiai. Creo que en este intercambio de ki yace parte del secreto para mejorar y superarse a uno mismo. Bushi do ni oite okuritorimouse majiki koto.
Fue así que el lunes tuve la oportunidad de tener un entrenamiento a solas con sensei, antes de la clase de iaijutsu. Estaba muy emocionada, nunca me había pasado. Tengo 12 años de entrenamiento ya, pero eso no me hace nadie especial, simplemente soy una alumna de Niten Argentina como podría serlo cualquier otra persona. Así que estaba decidida a sacar el máximo provecho de esa clase especial con sensei y ayudarlo en todo lo que pudiera con su clase regular, aunque sólo fuese llevar sus armas o sostener el cuenco con tinta para la caligrafía de los momentos de oro. Yunku no goyo ni tatsube kikoto.
Había viajado para entrenar con mi sensei después de varios años y no iba a dejar que se me escapase ningún detalle que fuese capaz de percibir. Estaba lista para anotar todo en mi libreta y así dejarlo grabado en mi memoria. Correcciones del kamae realizadas con el tacto o indicaciones sobre la distancia correcta y el foco de los cortes realizadas con el bokuto o jo. Muchos han utilizado la metáfora de beber agua de la fuente, pero para mí fue como empapa rme en pura energía. Como las llamas de una fogata que ilumina la oscura noche y nos atrae a calentar las manos a su alrededor. Energía cálida y acogedora que nos permite relajarnos un poco, pero también nos da fuerzas para seguir adelante porque se impregna en nuestra piel e invade todo nuestro cuerpo. Es tan pura que con sólo un poquito de ella podemos ganar mucha fuerza para enfrentar nuestros desafíos cotidianos e impulsarnos para alcanzar nuestros objetivos. Yo necesitaba de esa energía para vencer una batalla personal en la que vengo luchando desde hace varios años, por eso también decidí quedarme más días en San Pablo.
Shitsurei shimasu, onegaishimasu sensei
Realmente disfruté mucho poder entrenar jojutsu de forma intensiva y dedicada después de tantos años. Era precisamente lo que necesitaba para repasar detalles y pulir las técnicas que ya conocía. Iniciando con kihons, los movimientos básicos del jo, y terminando con los katas de Shindo Muso Ryu. Fue tan agotador como gratificante. Acabar con los pies adoloridos y los músculos cansados, pero con las baterías completamente recargadas. ¡Lista para ir por más!
Exactamente eso fue lo que hice.
Me quedé cuatro días más en San Pablo para poder entrenar con Sensei en el dojo central de Niten, Hokkaido. Desde hace más de tres años que no tenía la oportunidad de entrenar físicamente con Sensei, si bien durante la cuarentena en el 2020 asistí a casi todas las clases virtuales que dictó por Zoom desde su propia casa. Estar cara a cara, compartir el mismo espacio físico, no sólo me permitió ver más detalles que los mostrados por la cámara de la computadora, sino absorber e intercambiar energía con sensei, con senpais y kohais. Kiai. Creo que en este intercambio de ki yace parte del secreto para mejorar y superarse a uno mismo. Bushi do ni oite okuritorimouse majiki koto.
Fue así que el lunes tuve la oportunidad de tener un entrenamiento a solas con sensei, antes de la clase de iaijutsu. Estaba muy emocionada, nunca me había pasado. Tengo 12 años de entrenamiento ya, pero eso no me hace nadie especial, simplemente soy una alumna de Niten Argentina como podría serlo cualquier otra persona. Así que estaba decidida a sacar el máximo provecho de esa clase especial con sensei y ayudarlo en todo lo que pudiera con su clase regular, aunque sólo fuese llevar sus armas o sostener el cuenco con tinta para la caligrafía de los momentos de oro. Yunku no goyo ni tatsube kikoto.
Había viajado para entrenar con mi sensei después de varios años y no iba a dejar que se me escapase ningún detalle que fuese capaz de percibir. Estaba lista para anotar todo en mi libreta y así dejarlo grabado en mi memoria. Correcciones del kamae realizadas con el tacto o indicaciones sobre la distancia correcta y el foco de los cortes realizadas con el bokuto o jo. Muchos han utilizado la metáfora de beber agua de la fuente, pero para mí fue como empapa rme en pura energía. Como las llamas de una fogata que ilumina la oscura noche y nos atrae a calentar las manos a su alrededor. Energía cálida y acogedora que nos permite relajarnos un poco, pero también nos da fuerzas para seguir adelante porque se impregna en nuestra piel e invade todo nuestro cuerpo. Es tan pura que con sólo un poquito de ella podemos ganar mucha fuerza para enfrentar nuestros desafíos cotidianos e impulsarnos para alcanzar nuestros objetivos. Yo necesitaba de esa energía para vencer una batalla personal en la que vengo luchando desde hace varios años, por eso también decidí quedarme más días en San Pablo.
En iaijutsu creo que oí silbar mi iaito en todos los cortes, no lo podía creer. Tampoco sentí que la espada me pesase y el retroceso habitual al cortar que siempre me preocupaba y, al final del entrenamiento, me dejaba los hombros entumecidos. Yo no tenía ese nivel antes del viaje, ¿o sí? Me pregunté varias veces, todavía me pregunto. ¿Habré mejorado tanto por el intensivo de jojutsu o por la hora previa de entrenamiento con sensei? No creo tener nunca la respuesta, tenerla tampoco es algo importante. Sólo sé que fue un entrenamiento maravilloso que se acabó demasiado rápido. Había mucho por aprender y poco tiempo. Cuando venza mi batalla, voy a empezar a planificar un nuevo viaje a San Pablo. Realmente espero con ansias volver a repetir la visita al dojo de Hokkaido y, quién sabe, a algún otro dojo cercano también.
¡Domo arigato gozaimashita sensei por haber dedicado su tiempo a entrenar conmigo!
Domo arigato gozaimashita a Mika sensei por haber sido la compañera de sensei en su entrenamiento de jo y cofundadora del Instituto Niten, sin ella Niten no sería lo que es.
Domo arigato gozaimashita a todos los alumnos, senpais y kohais, que han transitado y aun transitan el camino del guerrero. Sin ellos, Niten tampoco sería lo que es hoy. Y, sin Niten, yo tampoco sería la mujer que soy.
Sayonara
Daiana
Unidad Caballito, Buenos Aires
Argentina.
¡Domo arigato gozaimashita sensei por haber dedicado su tiempo a entrenar conmigo!
Domo arigato gozaimashita a Mika sensei por haber sido la compañera de sensei en su entrenamiento de jo y cofundadora del Instituto Niten, sin ella Niten no sería lo que es.
Domo arigato gozaimashita a todos los alumnos, senpais y kohais, que han transitado y aun transitan el camino del guerrero. Sin ellos, Niten tampoco sería lo que es hoy. Y, sin Niten, yo tampoco sería la mujer que soy.
Sayonara
Daiana
Unidad Caballito, Buenos Aires
Argentina.
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